Durante los Juegos Olímpicos del 2008 en Beijing será posible ir con la familia a ver los espectáculos de natación, waterpolo o salto de trampolín en la Plaza del Agua, el complejo que será sede de estas competiciones.

Pero poco después de la ceremonia de clausura en verano del 2008, también será posible tomar un baño en las aguas olímpicas, asistir a clases de gimnasia o incluso ver una película en el mismo lugar, llamado Centro Nacional de Natación.

Li Baowei, director del Buró de Promoción de la Inversión, explicó ayer cómo se usarán las instalaciones tras los Juegos y desveló que la totalidad de los 31 proyectos relativos a las instalaciones están abiertos a inversores locales o extranjeros.

"Ahora nos estamos concentrando en la obtención de materias primas y accesorios deportivos, así como en la búsqueda de socios con experiencia en la gestión post-olímpica, tanto locales como extranjeros", explicó Li durante una conferencia de prensa para promocionar la feria de Artículos Deportivos e Infraestructuras Deportivas de Beijing que se celebrará los días 15-17 de Julio.

El Comité de Planificación y Desarrollo de Beijing (BDPC) ha hecho públicos detalles de los 31 proyectos en el sitio web: www.bjoe.gov.cn, oficialmente publicado el 18 de Abril.

"Se espera que el centro de ocio acuático, reciba unos 5000 visitantes diarios", explicó Kang Wei, director general de la compañía estatal Gestión de propiedades del Estado de Beijing Ltd. y principal impulsor del proyecto.

Pero no será sólo la Plaza del Agua el espacio que se abrirá al público, otras instalaciones también lo serán o serán vendidas. Tal es el caso del Centro Cultural y de Deportes de Wukesong, que albergará las competiciones de baloncesto y de baseball y más tarde integrará eventos culturales, y deportivos con la actividad comercial.

El parque Olímpico, con sus instalaciones residenciales, comerciales y recreativas se transformará en una zona residencial de nivel alto.

Chai Xiaozhong, director del BDPC remarcó que a la vez que alcanzar los altos estándares de los Juegos, "también debemos pensar cuidadosamente como usar las instalaciones luego".

Un grupo de expertos y representantes empresariales locales y extranjeros le han ofrecido sus sugerencias.

"Cuanto más simple, mejor. La funcionalidad debe primar sobre la estética", explicó Jordi Vallverdú, actual consejero y previamente director General de Barcelona Promoció, la empresa responsable de la gestión y mantenimiento de las instalaciones deportivas olímpicas de Barcelona.