Ubicada en la frontera en lo más nororiente de China, Heilongjiang es una provincia que ofrece a sus residentes y visitantes una mezcla única de maravillosos paisajes naturales. En el invierno, la nieve de Heilongjiang cubre los suelos, los árboles y todas las aguas de la provincia, creando así un espectacular paisaje acompañado por un sol tenue que apenas se puede percibir por las heladas temperaturas. No obstante, estas temperaturas que registran grados bajo cero durante todo el invierno, que dura cuatro meses, son una de las piezas que hacen posible la construcción de un mundo de hielo auténtico, en donde se pueden encontrar majestuosas obras de arte y de construcción. Cada año, el grandioso mundo de hielo en la ciudad de Harbin atrae a numerosos turistas de todo China y el globo, ofreciendo esculturas de hielo de todas las formas, envueltas por una abundante y colorida iluminación.

         

Debido a su ubicación geográfica, la llegada de la primavera a Heilongjiang es algo tardía. Los rayos del sol se hacen más notorios y las flores de múltiples colores en la montaña de Xing’an configuran un bello paisaje que se armoniza por el baile de las grullas.

         

Los turistas siempre serán testigos de los escenarios ofrecidos por Heilongjiang en sus cuatro estaciones. El sol del verano es manifiesto a pesar de los frondosos bosques ubicados en la provincia, los cuales le brindan oxígeno puro a todos los animales que aquí habitan. Además, la combinación de las tonalidades del cielo y los lagos crean un compás perfecto para la armonía de la naturaleza. Cuerpos de agua como lo son el Río Songhua y el Río Wusuli también son merecedores de este esplendor que se percibe en el verano.

         

En general, cada ciudad en Heilongjiang ofrece a sus turistas un estilo único. A Harbin se le otorga el nombre del Moscú Oriental, pues se puede experimentar un toque euroasiático en la arquitectura y la culinaria de la metrópolis. Por otro lado, la ciudad de Mohe se encuentra en la parte más septentrional de China y su particular cultura del Ártico, atrae a turistas de todo el mundo. También existe el estilo forestal de Yichun y la cultura fronteriza chino-rusa de Suifenhe que vale la pena explorar.